La secretaria general de innovación del Gobierno de España, Teresa Riesgo Alcaide, ha visitado hoy Bodega Emina, en Valbuena de Duero, para conocer la apuesta que lleva a cabo la empresa familiar en materia de innovación y su liderazgo en I+D+i. Bodega Emina siempre ha estado a la vanguardia de la innovación. Todos los proyectos de I+D se focalizan hacia la mejora de los cultivos leñosos y tecnología enológica; TICs, Big Data y nuevas tecnologías, sostenibilidad y medio ambiente.
La Bodega ha puesto en marcha una estrategia empresarial basada en el desarrollo sostenible y el respeto por el medio ambiente. La empresa persigue la minimización de los insumos y la generación de productos de alto valor añadido a partir de los sarmientos u otros co-productos del proceso de elaboración del vino. A estas actividades se suma su compromiso con el medio ambiente con la construcción de instalaciones ecoeficientes, agricultura ecológica o producción integrada; así como el abastecimiento energético de todos los centros productivos con energía solar fotovoltaica.
Para Carlos Moro, presidente y fundador de Bodega Emina, “la única vía para ganar en competitividad, rentabilidad, eficiencia y crecimiento en el escenario actual, cada vez más exigente desde el punto de visto medioambiental y de adaptación al cambio climático, es a través de la transformación de los productos agrarios y a través de los productos innovadores”, ha asegurado. En este sentido, el bodeguero ha añadido que “todo empieza por las prácticas enológicas y Bodega Emina aplica ya desde 2022 un sistema de producción ecológica o integrada”.
Su búsqueda constante de proyectos punteros en I+D+i ha hecho posible que Bodega Emina sea líder en I+D+i y sostenibilidad en el sector bodeguero en todo el mundo. Su ambicioso plan de minimización de insumos en las explotaciones agrícolas, va dirigido a la incorporación de riegos deficitarios y sostenibles en los cultivos leñosos, de cara a aplicar los niveles óptimos de agua para maximizar la eficacia de estos. Para conseguir este objetivo, la compañía ha instalado en sus parcelas sensores de clima, suelo y planta. A su vez, ha automatizado el sistema de fertirrigación, lo que permite un control en remoto de la disponibilidad de agua y nutrientes de cada cultivo para la toma de decisiones en tiempo real.
Su política de reducción de emisiones y huella de carbono junto al plan de reducción de huella hídrica agrícola y bodeguera son algunos proyectos lideres en materia de sostenibilidad, así como la aplicación de la “economía esférica”, que consiste en el máximo aprovechamiento de productos y coproductos a lo largo de toda la cadena de producción.
En el ámbito de la tecnología enológica, en diciembre de 2022, la compañía fue reconocida con el Premio de Innovación de la Plataforma Tecnológica del Vino, en la categoría de Proyecto I+D+i consorciado, por el proyecto Innomicrovin. Este proyecto ha sido seleccionado por su relevancia científica y técnica en la innovación, al obtener cepas de levaduras con características genéticas diferentes a las que se encuentran en la uva o el mosto, como alternativa a la elaboración de vinos con levaduras convencionales.